Al hilo de las ensoñaciones...

domingo, 10 de marzo de 2019

Ensoñación


Una estrecha franja en el gris helado. Un vacío espacio-temporal que pone en marcha la huida hacia ninguna parte. Evasión, punto de fuga.
“Recuerda, cuerpo” las tardes de verano. El sol y la piel expuesta a la languidez estival.
El tiempo detenido; alguien lo  ha extraviado en mitad del invierno.
Sol, calma y  piel. Las horas muertas y la respiración entrecortada marcan el compás de una cadencia hedonista.  Una mano sigue el mapa infinito del deseo.
Horas llenas, horas vacías, horas perdidas.  Lejos.  Imposible.

Verano.

Un susurro quedo detiene los segundos de golpe. El gris olvidado se ha roto definitivamente.  
Aquí, fuera del mundo, unos labios han entrado en llamas. 
Hoy es nunca, eterna tarde de verano.